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Un componente del robot creado por el equipo de MIT School Robofox

Los alumnos de MIT School han finalizado en 11ª posición en el concurso de robótica First Tech Challenge, en el que compiten estudiantes de toda Europa. Los estudiantes del colegio llegaron a la última ronda en 8ª posición, pero un fallo de software los alejó del top diez. El encuentro, celebrado en Eindhoven durante los días 27, 28 y 29 de marzo, ha supuesto la segunda participación para MIT School.

La llegada a los Países Bajos estuvo acompañada de nervios, prisas y modificaciones, aunque la experiencia del equipo permitió solventar todos los imprevistos sin sobresaltos. Las primeras pruebas fueron positivas para el equipo Robofox, nombre con el que compitió y competirá el colegio de ahora en adelante. El robot se movía con soltura, cogía los cubos  y se colgaba de la barra habilitada para suspenderse en el aire con total facilidad. En el segundo día de pruebas se produjeron algunos problemas en la verificación de los robots, tanto en el hardware como en el software.

Al tercer día llegó el momento de competir. El equipo se mostró muy ilusionado en la primera ronda, aunque la ilusión se convirtió en nervios y fallos. Los pilotos colgaron los robots en la barra antes de tiempo y perdieron los primeros puntos del concurso. Los nervios desaparecieron en la segunda ronda: Robofox cerró una buena actuación y se coló entre los ocho primeros con la posibilidad, además, de hacer alianza para la final.

Sin embargo, la mala suerte se cebó con el equipo en la tercera ronda. Durante todo el día, el Program Chooser había dado problemas a los contrincantes, y en esta ocasión le tocó a los estudiantes de MIT School. El robot perdió la comunicación con la mesa de control durante la última etapa y el equipo perdió puntos decisivos que le retrasaron de la 8ª a la 11ª posición.

“El equipo estaba un poco decepcionado, pero tienen que entender que son jóvenes (entre 16 y 18 años) y la media de edad de los equipos que competían era de 24 años. Personalmente, creo que ya se han asentado las bases de un equipo de robótica en MIT”, ha explicado Ignacio Arias, el profesor que ha acompañado a los alumnos en la ciudad neerlandesa.

Sea como fuere, el Colegio está muy orgulloso del trabajo de este fantástico equipo, de cuya hazaña dio cuenta La Opinión de Málaga, como se puede ver un poco más abajo.  ¡Felicidades a todos!

MIT School aparece en La Opiniòn de Málaga